Hace unos meses te presentamos el segundo álbum de Feotitulado Lo suficientemente mayor como para salvarme. Un disco en el que la cantante explora temas relacionados con el crecimiento, la transformación personal y las dificultades de madurar en un mundo como el actual donde las certezas están más aceptadas que las dudas y la vulnerabilidad.
Lo suficientemente mayor como para salvarme ha sido producido por Manuel Colmenerocreando un equilibrio entre texturas electrónicas y orgánicas donde las canciones de Feocon influencias que van desde Radioteco Y Estrella mazzy hasta otras más actuales como Lana del Rey Y Phoebe Bridgersse encuentran como pez en el agua.
Un disco tan íntimo y personal merecía una charla con su principal protagonista, así que nos hemos puesto en contacto con Feo para que nos cuenta más cosas sobre este segundo álbum y, en general, sobre su carrera hasta el momento.
«Todo lo que vivo, de algún modo, termina colándose en mis canciones»
En primer lugar, explícales a nuestros oyentes quién es Rumia, qué te movió a dedicarte a la música y cómo has llegado hasta este segundo álbum, Lo suficientemente mayor como para salvarmedel que vamos a hablar.
Rumia es mi proyecto personal. Desde muy pequeña la música ha estado muy presente en mi vida, pero fue a los 16 años, cuando empecé a tocar la guitarra, que sentí esa necesidad de componer y de contar historias a través de las canciones. Lo suficientemente mayor como para salvarme es el resultado de todos estos años de aprendizaje, de madurar, de caer y levantarme.
Tienes raíces españolas y portuguesas, y además llevas un tiempo en Berlín. ¿Qué aporta a tu música esa variedad de influencias, de entornos, qué has ido absorbiendo de cada uno de esos lugares que luego vuelcas en tus canciones?
Creo que todo eso ha hecho que mi música tenga varias capas. De Galicia y Portugal he absorbido la conexión con lo emocional, con lo profundo y toda la melancolía que hay en mis letras. De Berlín he aprendido a arriesgar más, a experimentar y a no tener miedo de mezclar sonidos, de jugar con lo electrónico sin perder la esencia orgánica de los instrumentos acústicos. Todo lo que vivo, de algún modo, termina colándose en mis canciones.
Tus canciones tienen estructuras pop pero no solo le das importancia a las melodías y los ritmos, sino también a las texturas, los efectos y los ambientes. Manejas la electrónica de una forma muy humana y sensible, al estilo de gente como Lana del Rey o Mazzy Star. ¿En qué te enfocas más a la hora de crear una canción?
Para mí lo más importante es que todo el instrumental abrace la letra y la melodía y acompañe el sentimiento que quiero transmitir. A veces empiezo con la guitarra o el piano porque necesito contar algo muy directo, y otras veces parto de un ambiente sonoro, de una textura, y a partir de ahí dejo que la canción crezca. Lo que nunca pierdo de vista es que todo tiene que sumar a la historia que quiero contar.
Supongo que la presencia de guitarras acústicas y pianos contribuye bastante a esa sensación de estar ante un sonido mixto, donde lo orgánico y lo electrónico se confunden y se integran en un todo con estilo propio. ¿Resulta difícil esa integración? ¿Era algo buscado desde el principio?
Sí, era algo muy buscado. No es fácil porque corres el riesgo de que una cosa se coma a la otra, pero trabajamos mucho en producción para que ambas partes se equilibraran y formaran un todo coherente.
Me gustaría saber cómo llegan en general las canciones al estudio, y qué decisiones se toman durante la grabación y sobre todo en producción, si se puede contar.
Algunas canciones llegan bastante armadas porque compongo y maqueto en casa. Pero en el estudio, junto a Manuel Colmenero, es donde terminamos de darles ese pulido final, donde jugamos con los sonidos, con los espacios, y donde a veces una canción puede transformarse mucho.
A diferencia de tu anterior álbum, donde todas las canciones eran en inglés si no me equivoco, en el nuevo disco hay una en portugués y otra en castellano. ¿Te sientes más cómoda en inglés, te sirve mejor para expresar lo que quieres contar? ¿Por qué ahora has decidido incluir esas dos canciones en portugués y castellano?
Empecé escribiendo en inglés porque durante años fue el idioma que me acompañó, sobre todo viviendo fuera. Pero con este disco sentí la necesidad de reconectar con mis raíces, de hablar en los idiomas en los que crecí, y por eso hay canciones en portugués y en español. Al final, cada lengua tiene su propia música, su forma de emocionar. Me resulta más fácil en inglés porque es cómo empecé y además estudié composición en inglés. Pero quiero llegar a ese nivel de comodidad con mis otros idiomas.
Precisamente la canción en castellano se titula «La chica de ningún lugar». No sé si tiene algo de autobiográfico, dado lo que hemos hablado antes de tus raíces y las diferentes culturas de las que te has ido empapando.
Sí, es completamente autobiográfica. Es una carta de amor a mis raíces, a mi familia y a esa sensación de estar siempre un poco entre sitios. Y en realidad la escribí un poco por la necesidad de responder a las preguntas de mis idiomas y de dónde vengo.
“data-cs-src =” https://www.youtube.com/embed/qapcwwwwhxivfc?feature=oembed “frameBorDer =” 0 “permitido =” acelerómetro; Autoplay; portapapeles-escritura; Media encriptada; giroscopio; imagen en imagen; Web-SHARE “referRerPolicy =” Strict-Origin-when-Cross-Origin “PermishFullScreen>
A pesar de tu juventud, en algunas de tus letras hablas de temas como la madurez, la formación de una familia y las responsabilidades que lleva consigo. Supongo que llegado un momento es inevitable sentir cierto vértigo, y que esas sensaciones acaban plasmadas en alguna canción.
Totalmente. Creo que cuando empiezas a dejar atrás los veinte y entras en otra etapa, te haces muchas preguntas sobre lo que quieres, sobre lo que esperabas de ti misma y sobre que quieres o a quien quieres priorizar en tu camino. Y ese vértigo del que hablas está muy presente en el disco. También es una etapa muy bonita porque cuanto más mayor te haces más te quieres a ti mismo y menos te importa lo que piensen los demás.
Me imagino también que el título del disco, Lo suficientemente mayor como para salvarmeestá escogido también con esa idea y no es para nada aleatorio.
Así es. Es un título que resume ese momento en el que dejas de esperar que los demás te salven o te den las respuestas, y entiendes que la única persona que puede cuidar de ti eres tú misma.
Acabas de volver de una amplia gira que ha pasado por numerosas ciudades españolas y portuguesas. ¿Qué tal te ha ido? ¿Qué destacarías de la experiencia?
Ha sido increíble. Lo que más destaco es cómo el público ha conectado con las canciones en directo. Me ha encantado también ver la reacción a las canciones en portugués y español. Han gustado mucho!