El director Charles F. Haas estrenó una película que, sin ser una obra maestra del género, termina siendo una cinta de vaqueros bastante decente

El gran salto a la fama de Clint Eastwood fue con Por un puñado de dólares, que desembocaría en la famosísima saga de Sergio Leone titulada Trilogía del dólar, pero no fue éste el primer western en el que trabajó. Antes de ser conocido internacionalmente, Eastwood era uno de los muchos aspirantes a actores que trataba de buscarse la vida y tuvo que hacer pequeños papeles en espera de su gran oportunidad.
Uno de ellos fue en El último sol, una película dirigida por Charles F. Haas y estrenada en 1956 donde Eastwood tiene un pequeño trabajo como Tom, un peón del rancho al que va el sheriff. Puede que, si no sabes que está en la película, lo ignores sin darte cuenta, pero en cuanto lo reconoces resulta imposible dejar de fijarte en él. Aquí va una imagen como muestra:

Universal Pictures
Por aquella época, Eastwood encadenó varias películas entre 1955 y 1964, casi todas ellas sin acreditar y con nombres como ‘técnico de laboratorio’ o ‘médico naval’.
‘El último sol’, esta tarde a las 18.45h en Trece
En El último sol, la historia se centra en el sheriff de Gunlock, Bill Jorden, quien quiere colgar a Sam Hall por el asesinato de tres agricultores, pero nadie en el pueblo cree que sea capaz de hacerlo. Los ganadores habían contratado a Sam para matar a los ganadores y así poder adquirir más tierras de pastoreo, así que quieren defenderlo. Por otro lado, los granjeros quieren que sea ajusticiado lo antes posible. Temiendo la violencia entre ganaderos y granjeros, Jorden intenta pedir ayuda.
La película no es demasiado relevante más allá del hecho de contar con el papel de un jovencísimo Clint Eastwood, pero puede ser una buena propuesta para los más cafeteros del género ‘western’. Los usuarios de Rotten Tomatoes le dan un 40% de valoración y hay quien indica que, pasados los primeros 30 minutos, la película termina alzándose como una película de vaqueros bastante decente.