Una secuencia de la novela de Michael Crichton que estuvo a punto de estar en la original y David Koepp ha conseguido introducir en la séptima película de la franquicia
En 1993, Jurassic Pak (Parque Jurásico) tuvo que prescindir de un fragmento de la novela de Michael Crichton que inicialmente sí había intención de introducir en la película por falta de tiempo. Sin embargo, David Koepp, el guionista de la película original que se encargó de la adaptación de la famosa novela, ha regresado como guionista en la recién estrenada séptima entrega de la franquicia y ha logrado rescatar la secuencia.
Ya lo adelantó el propio Koepp en una entrevista con Variety a principios de año, pero, mientras entonces tenía que mantener en absoluto secreto la secuencia a la que se refería, ahora que Jurassic World: El renacer ya ha visto la luz en las salas de cine por fin sabemos de qué escena se trata.
Según explicó el guionista, tras volver a leer las novelas para entrar en situación, se acordó de aquella idea inicial nada más leer el pasaje: “Había una secuencia de la primera novela que siempre habíamos querido en la película original, pero no teníamos espacio para ella. Pensamos: ‘Oye, podemos usarla ahora”, recordó. “¿Sigue siendo divertido? Y la respuesta es sí, todavía lo es. Los dinosaurios siguen siendo divertidos”.
Al final, la secuencia en cuestión ha acabado siendo una de las escenas más memorables de Jurassic World: El Renacer: en ella la familia Delgado -Reuben (Manuel García-Rulfo), sus hijas Teresa (Luna Blaise) e Isabella (Audrina Miranda) y Xavier (David Iacono)- intentan escapar de un T-Rex a bordo de un inestable bote hinchable a la deriva.
En la secuencia, el agua no logra disuadir al dinosaurios, que incluso llega a introducirse en el agua y los acaba persiguiendo río abajo hasta la entrada de una zona de rápidos, en lo que acaba siendo uno de los momentos más impresionantes y tensos de la película.
En el libro de Michael Crichton no sucede realmente así, pero hay un fragmento en el que Alan Grant, el personaje interpretado por Sam Neill, se subía a una balsa junto a Lex y Tim para tratar de llegar al centro de visitantes a través de uno de los ríos de Isla Nublas, aunque los tres se acababan encontrando con un Tyrannosaurus Rex en el agua.
Aunque tanto a Steven Spielberg como a David Koepp les gustaba la escena y llegó a desarrollarse e incluso rodarse parcialmente para la película original de 1993, se desarrolló, e incluso se rodó parcialmente, pero finalmente fue descartada. Los efectos de agua, el coste y las incertidumbres técnicas que rodeaban a un dinosaurio CGI en el agua llevaron al equipo a eliminarla.
“Era 1992 y nadie sabía si la animación generada por computadora funcionaría, y mucho menos si lograría que un dinosaurio nadara”, explicó el guionista David Koepp a Entertainment Weekly con motivo del estreno de la película. “Ya era bastante caro y con tecnología no probada, así que no funcionó. El agua seguía siendo, en 1992, un gran desafío. Como pueden ver, ya no lo es”.
Curiosamente, el director de la nueva película y gran fan de la saga Gareth Edwards estaba deseando rodar la escena en cuestión, pero desconocía en aquel momento que la secuencia se había escrito originalmente para la película de 1993. “No lo supe durante el rodaje, pero más tarde descubrí que era una secuencia que habían intentado incluir en el guion original de Jurassic Park”, admitió en una entrevista con The New York Times.
Más de treinta años después, la escena finalmente ha logrado existir. Puedes verla en Jurassic World: El renacer, actualmente en las salas de cine españolas.