
La actriz mostró abiertamente su postura opuesta a la de la autora de ‘Harry Potter’ respecto a los derechos de las personas trans en el momento más álgida de la polémica
Hubo un tiempo en el que J.K. Rowling, la autora de la saga literaria más vendida de la historia, y los actores de la saga cinematográfica de Harry Potter, fueron uña y carne. Sin embargo, la postura de la escritora británica respecto a las personas transgénero que tanta polémica ha generado durante los últimos años ha terminado por distanciarlos.
La polémica en torno a la postura de la autora comenzó a raíz de unas publicaciones en Twitter por las que fue acusada de tránsfoba y la situación empeoró tras la publicación en de un ensayo en el que defendía su posición, enumeraba las cinco razones por las que estaba “preocupada” sobre el nuevo “activismo trans” y se señalaba a sí misma como una superviviente de abuso sexual.
A raíz de la polémica en torno a la autora, fueron muchos los protagonistas de la saga Harry Potter y derivadas, empezando por Daniel Radcliffe, Emma Watson y Eddie Redmayne, los que salieron en densa de la comunidad transgénero. Con el paso de los años, la situación no solo no ha mejorado, sino que incluso ha llegado a rumorearse que Rowling estaría tan interesada en una nueva adaptación de Harry Potter para que sus queridos personajes fuesen asociados con otros actores.
Si hay algo de eso o no en la serie que prepara HBO Max no lo sabremos a ciencia cierta, pero J.K. Rowling confirmaba en 2024 que no perdonará a las estrellas de Harry Potter haber criticado su postura sobre los derechos de las personas trans: “Las celebridades que se alinearon con un movimiento que buscaba erosionar los derechos de las mujeres, conquistados con tanto esfuerzo, y que usaron sus plataformas para vitorear la transición de menores, pueden guardar sus disculpas para quienes han sufrido la detransición y para las mujeres vulnerables que dependen de espacios separados por sexos”, escribió en respuesta a un usuario en Twitter.
Emma Watson: “Espero poder seguir queriendo a quienes no necesariamente comparten mi opinión”
Ahora ha sido Emma Watson quien ha tenido que abordar el tema durante una entrevista con Jay Shetty en su podcast esta semana y lo ha hecho mostrándose conciliadora y lamentando que sus opiniones enfrentadas hayan tenido que perjudicar su posición. En su día, Watson twiteó a raíz de la polémica: “Las personas trans son quienes dicen ser y merecen vivir sus vidas sin que se les cuestione constantemente ni se les diga que no son quienes dicen ser”.
“Realmente no creo que haber tenido esa experiencia y albergar el amor, el apoyo y las opiniones que tengo signifique que no pueda apreciar a Jo ni a la persona con la que tuve experiencias personales”, ha respondido Watson sobre su relación con la autora. “Nunca creeré que una cosa niega a la otra y que no pueda conservar y apreciar mi experiencia con esa persona. Volviendo a lo que dijimos antes, simplemente no creo que estas cosas sean una u otra”.
Creo que mi mayor deseo es que quienes no están de acuerdo con mi opinión me quieran, y espero poder seguir queriendo a quienes no necesariamente comparten mi opinión. Lo que más me molesta es que nunca se haya podido conversar
Asimismo, durante su entrevista, Watson recordó su cariño los años que había trabajado en Harry Potter, encarnando a Hermione Granger, uno de los personajes principales. Según la actriz, aquella experiencia acabó generándoles expectativas poco realistas sobre sus futuros trabajos: “Llegaba a los sets con una expectativa que creo que ya había desarrollado en Harry Potter: que las personas con las que trabajaba serían mi familia y amigos para toda la vida. Llegaba a trabajar buscando amistad, y fue una experiencia muy dolorosa. Fuera de Harry Potter y en Hollywood, fue demoledor, realmente doloroso… porque la mayoría de la gente no viene a esos entornos buscando amistades. Buscan: ‘Esta es mi oportunidad, este es mi papel, esto es lo que quiero. Estoy centrado, este es mi trabajo, esta es mi carrera. Vamos’. Y yo no tenía esa mentalidad. Así que el rechazo me resultó muy doloroso”.
Aunque no retirada por completo, la actriz lleva siete años sin trabajar, desde la película Mujercitas de Greta Gerwig, y está dedicada a otras ramas profesionales, así como en sus estudios de posgrado. Tal y como revelaba en una reciente entrevista, a veces echa de menos actuar, pero no la parte más comercial del trabajo de ser actriz.