“Nunca podremos recuperar ese genio”, añadió. Aunque algunos odian la misión al espacio del grupo, otros aplaudieron ante la ocurrencia
Fast & Furious 9 es la película que alberga la escena más memorable de toda la franquicia de acción -a excepción del adiós a Brian O’Conner tras la muerte de Paul Walker-. En esa película, Roman Pearce (Tyrese Gibson) y Tej Parker (Ludacris) fueron lanzados al espacio en un coche que había sido previamente modificado para ser un cohete. Tenían como misión destruir un satélite llamado el Proyecto Aries para frustrar los planes del villano Otto y así lograr salvar al mundo.
Se ha comentado mucho acerca de esta escena y hay fans de Rápidos y furiosos que dieron gracias al equipo por incluir algo tan loco. “Hay un momento en el que Roman sugiere en broma la idea más loca que se ha planteado en toda esta serie de 10 películas y Dom responde: “Eso es exactamente lo que vamos a hacer” y amigos, aplaudí“, dice el usuario Patrick Willems en Letterboxd.
Pero también fue muy criticada por un sector del público, que cada vez ve con peores ojos las excentricidades del equipo de Vin Diesel. “¿Cómo llegamos a esto desde la época en que Brian O’Connor competía con Dom en Los Ángeles? Esta película parece una exageración del estudio”, dice otro usuario de dicha red social, quien le da una estrella y media a la película de acción.
Universal Pictures
“Lamento haberlos enviado al espacio”, dice la ejecutiva de Universal y asegura que toman muchas ideas de los fans
En un reciente encuentro en el Festival de Cine de Toronto, Donna Langley, directora de NBC Universal, habló sobre dicha escena.
Lamento haberlos enviado al espacio. Nunca podremos recuperar ese genio
Y aseguró que muchas ideas de las películas nacen de las aportaciones de los fans en redes sociales. “Vin [Diesel] fue uno de los primeros en hablar directamente con sus fans. A medida que veíamos que esto crecía y hacia dónde se dirigía la conversación, siempre hemos priorizado a los fans en la franquicia Fast“, asegura, según recoge Variety.
Esta investigación en internet les hizo ver claras cosas como que la audiencia no quería ver a Letty muerta. “[La gente] decía cosas como: ‘¡Dios mío, no maten a Letty!’. Bueno, la traeremos de vuelta. ‘Nunca murió. No se preocupen. No hay nada que ver aquí’. Pero todo eso se debe a la participación de los fans”, ha asegurado en el encuentro.
Langley también aseguró que parte del éxito de la saga ha sido su adaptabilidad y la decisión de dar un giro drástico al objetivo de los protagonistas. Señaló el punto de ruptura entre Tokyo Race (2006) y Fast & Furious 4 (2009). “Sabíamos que teníamos que encontrar la manera de expandirlo. Decidimos conscientemente enfocarnos en una especie de robo trotamundos”, señaló la ejecutiva.