Quentin Tarantino sabía perfectamente qué dos palabras utilizar en francés para que el personaje de Christoph Waltz diera aún más miedo. Lo curioso es que hay que estar muy atento para entender por qué usa esas y no otras
Quentin Tarantino había escrito un personaje que le fascinaba para Malditos Bastardos: Shosanna era una mujer fría, valiente, una asesina con una lista de alemanes nazis que iba tachando a medida que los mataba. ¿Te suena? Exacto: el director decidió utilizar su personalidad directamente para La Novia, interpretada por Uma Thurman en Kill Bill, y volver a escribir a Shosanna desde cero. No fue casualidad: el director estuvo una década mejorando el guion hasta que estuvo totalmente a su gusto, puesto que lo veía como su gran obra maestra. La buena noticia para Quentin es que, efectivamente, lo fue.
Qué me Quentin, Tarantino
De hecho, era un guion tan largo que Tarantino estaba convencido de hacer una miniserie hasta que Luc Besson le convenció de que siguiera adelante como película. Lo curioso es que el director quería, sí o sí, que Hans Landa estuviera interpretado por Leonardo DiCaprio, pero en el último segundo pensó que era mejor idea que estuviera interpretado por alguien que hablara alemán de manera nativa: el gran Christoph Waltz.
Waltz creó un personaje inolvidable por muchas cosas, pero hay una escena en particular donde se muestra su eterna maldad fascinante: cuando dispara a los judíos bajo el suelo dice “Adieu!”, una palabra que en francés se dice cuando esperas no volver a ver nunca a alguien, y al despedirse de Shosanna, en la distancia, grita “Au revoir!”, que es lo que se dice cuando esperas volver a ver a alguien de nuevo. Y vaya que si la vuelve a ver.
De hecho, esa es la escena favorita de Tarantino de todas las que ha guionizado jamás. Malditos bastardos ha sobrevivido como una de las películas más influyentes del siglo, que cimentó aún más la casi perfecta carrera de su director. Y mientras tanto, seguimos esperando la décima y última película… si es que alguna vez llegamos a verla.