Julia Roberts fue apodada “Tinker Hell” en el set de rodaje de ‘Hook’ y Spielberg no la defendió. Eso marcó su relación para siempre
Ni Steven Spielberg ni Julia Roberts encajan con el perfil de persona conflictiva en un set de rodaje, pero lo cierto es que el reputado cineasta y la oscarizada actriz no tuvieron la mejor de las experiencia cuando trabajaron juntos en Hook, la película de 1991 protagonizada por Robin Williams como Peter Pan y en la que Roberts interpretó a Campanilla a las órdenes del director de Jurassic Park.
¿Qué fue lo que pasó entre Julia Roberts y Steven Spielberg para que nunca más volvieran a trabajar juntos? En realidad, fue un problema en la vida personal de Julia Roberts lo que lo estropeó todo. Mientras a nivel profesional la actriz pasaba por un momento fantástico tras el éxito de Pretty Woman en 1990 y se había convertido en la elegida del Spielberg para encarnar un personaje clave en uno de sus ambiciosos proyectos, a nivel personal las cosas no le iban tan bien.
Julia Roberts tenía solo 23 años y estaba comprometida con el también actor Kiefer Sutherland, a quien había conocido un año antes durante el rodaje de una película. Durante el rodaje de Hook la pareja estaba en plenos preparativos de su boda cuando ella descubrió que su novio le había sido infiel supuestamente, mientras que ella también le habría engañado con su amigo el actor Jason Patric. Cuando la prensa se enteró, el asunto fue tan jugoso que Julia Roberts se convirtió en el target de los paparazzis durante la producción, lo que no fue precisamente cómodo para nadie.
Aquello hizo crecer la tensión en una situación que ya de por sí era tensa en el set. Al parecer Julia Roberts no tenía muy buenos modales con nadie y fue apodada como “Tinker Hell” -un juego de palabras entre Tinker Bell (Campanilla en inglés) y Hell (Infierno)-. Estaba dolida por su situación personal y no era especialmente agradable.
Julia Roberts fue apodada “Tinker Hell” en el set y Spielberg no la defendió
Steven Spielberg reconoció en una entrevista con 60 Seconds en 1992 que no había sido el mejor momento para trabajar con Julia Roberts, aunque elogió sus dotes interpretativas:
Fue una época desafortunada para nosotros trabajar juntos, pero creo que Julie es una actriz realmente buena
Sin embargo, cuando el productor le preguntó si volvería a trabajar con ella, Spielberg respondió con una sonrisa y un silencio que valió más que mil palabras. Y efectivamente no volvieron a trabajar juntos.
Por su parte, Julia Roberts se sintió muy dolida y en una entrevista con Vanity Fair en 1993 acusó a Spielberg de haberse dejado llevar por lo que decían otros y sumarse a la opinión dominante: “Independientemente de lo que estuviera pasando en mi vida cuando estaba haciendo esa película, creo que soy muy buena separando mi casa del trabajo cuando voy allí y luego mi trabajo de casa cuando vuelvo”, aseguró.
Según Roberts, como su personaje era mucho más pequeño y sus escenas tenían que superponerse a las de otros actores, pasó mucho tiempo rodando sola. “Lo pasamos bien. Me da igual lo que digan. Me habría dado curiosidad escuchar a cualquiera que estuviera realmente en mi estudio de sonido, en mi estudio de pantalla azul, que trabajara conmigo y tuviera algo malo o desagradable que decir. Así que me sorprendió mucho cuando la gente empezó a soltar todas esas declaraciones, y gente de la que nunca había oído hablar que supuestamente estaba allí”.
Fue sorprendente, desafortunado y decepcionante, pero aquí es donde mi confianza puede ser tanto una maldición como una bendición, porque el Sr. Spielberg se sintió proclive…
“No fue desagradable [conmigo]. Era muy tímido, sí. Se tomó estas dudas como si tuviera que elegir sus palabras con mucho cuidado cuando le preguntaban por mí. Lo vi y pensé: ‘¿Es este el mismo hombre con el que me peleé por la nata montada en el rodaje?. ¿Es este el mismo hombre que decía que ansiaba llegar a nuestro escenario cada día porque era más divertido que el escenario principal, más relajado y fácil, y que aunque tardé nueve horas en preparar la toma, la hice rapidísimo, mantuve todo en movimiento, siempre estaba de buen humor y no me quejaba?’. Supongo que a veces es demasiado tentador ser parte de la mayoría. Que incluso dijera que fue difícil para mí pasar por una experiencia personal como esa mientras hacía una película… bueno, sí, lo es. ¿Pero lo hice con la misma facilidad que cualquiera podría hacerlo? Sí. ¿Alguna vez siento que lo incomodé con mi vida personal de alguna manera en el set? No.”.
Aunque no es la mejor película de Spielberg, Hook resultó ser un éxito de taquilla, recaudando más de 300 millones de dólares en todo el mundo y ha pasado a la historia como uno de los papeles más icónicos de Robin Williams.