Ewan McGregor y Josh Hartnett protagonizaron este filme bélico con el que el cineasta consiguió una nominación al Oscar a Mejor director
Ridley Scott lleva a sus espaldas casi 30 películas. Con tal cantidad de proyectos, es normal que al cineasta se le hayan olvidado un poco las primeras. De ahí que el director se haya sorprendido cuando ha visto uno de sus filmes de principios de los 2000.
Hace 24 años, Scott dirigió la película bélica Black Hawk derribado (2001). Protagonizada por Ewan McGregor, Eric Bana y Josh Hartnett, la historia es la de 160 soldados de élite estadounidenses enviados a Somalia para capturar a dos señores de la guerra.
“¿Cómo conseguí hacer eso?”, ha contado Scott que pensó cuando volvió a ver Black Hawk derribado. El cineasta ha reconocido en Variety que siente que el cine actual es mediocre. “La cantidad de películas que se hacen hoy día, literalmente a nivel global: millones. No miles, millones… y la mayoría son una mierda”, afirmó.
Sobre las películas dirigidas por otras personas, Scott reconoció: “Creo que, de vez en cuando, surge una buena. Es un alivio que haya alguien ahí fuera haciendo una buena película“.
Tres nominaciones al Oscar

Sony Pictures
Scott hizo Black Hawk derribado -disponible en Movistar Plus+– después de dirigir filmes como Thelma & Louise (1991) y Gladiator (2000), que le dieron, cada una, una nominación al Oscar a Mejor director. Black Hawk derribado supuso su tercera nominación en la categoría de dirección. La película también terminó entre las candidatas a Mejor dirección de fotografía y Mejor edición. Solo se llevó este último premio.
Black Hawk derribado, que costó 92 millones de dólares, no fue ningún éxito comercial: recaudó 172.9 millones de dólares en todo el mundo. Sin embargo, la crítica la recibió de forma positiva. De ella, la prensa especializada destacó que es “un retrato visceral y trepidante de la guerra, elevado por la magnífica habilidad técnica de Ridley Scott”. Como contrapunto negativo, también señalaron que el filme “carece de desarrollo de personajes y empatía cultural”.