Algunas personas llevan 36 años preguntándose qué significa el 99 que vemos en el cielo en la secuencia final de la película
Hace 36 años, la segunda parte de Regreso al futuro, Regreso al futuro II, llegaba a las salas de cine para convertirse rápidamente en la favorita de la franquicia para muchos espectadores que unos años atrás ya se habían rendido ante el carisma de la película de Robert Zemeckis y Bob Gale. Varias décadas después, la segunda entrega de la perfecta trilogía sigue siendo la más especial para muchos, puesto que en ella pudimos imaginar un futuro repleto de nuevas tecnologías y gadgets de lo más divertidos. ¿Quién no soñaba con un aeropatín o con cafeterías futuristas como en la que Marty se encontraba con su propio hijo?
A los elementos ya entonces míticos de la saga de ciencia ficción, como el Delorean o el Condensador de Fluzzo, Regreso al Futuro II incorporó nuevos conceptos que pasarían a formar parte de la cultura pop, como el ya mencionado aeropatín, los robocordones o la cazadora autoajustable con autosecado. Asimismo, como el resto de películas de la trilogía, Regreso al futuro II nos dejó múltiples interrogantes e incluso potenciales agujeros de guion que nos hemos repetido durante años.
Algunos recibieron explicación por parte de los creadores, mientras que otros, como el Modo: Litio, nunca la tuvieron.
Uno de estos famosos interrogantes que no recibieron respuesta surgió a partir de un simple fotograma en el final de Regreso al futuro II: un “99” ardiente al revés que aparece en el cielo y que desató algunas teorías bastante curiosas sobre su significado. Sin embargo, el famoso 99 no significa nada.

Universal Pictures
El propio Bob Gale, cocreador de la franquicia junto a Robert Zemeckis, se encargaría personalmente de desmentirlo en una entrevista con The Hundreds en 2015 con motivo del aniversario más destacado de la trilogía.
La gente pregunta sobre eso todo el tiempo: ‘¿Qué significa eso?’. Bueno, lo que realmente significa es que la máquina del tiempo tenía que ir a 140 kilómetros por hora para viajar en el tiempo. Así que lo que ocurrió fue que cuando un rayo impactó al DeLorean en la parte delantera o trasera, lo hizo girar y aceleró hasta 140 kilómetros por hora mientras giraba. Así que, al girar, las estelas de fuego que dejó fueron circulares
Así, no solo el 99 no significaba nada, sino que ni siquiera se trataba de un 99.
¿Puede haber trilogía más perfecta que la que nos sigue sorprendiendo 40 años después?